¿Qué monitores de estudio elegir?

Una pregunta bastante frecuente es “qué monitores de estudio debo elegir”.

A la hora de elegir unos monitores de estudio hay que tener en cuenta que serán la conexión que tendremos con lo que esté ocurriendo dentro de la mezcla o la producción que estemos llevando a cabo, y es muy importante que los monitores no mientan, y que sean un fiel reflejo de lo que está ocurriendo.

Varios factores importantes a tener muy en cuenta són:

  • – Fidelidad de los componentes
  • – Respuesta de frecuencia
  • – Coloración del sonido
  • – Distorsión armónica

Marcas hay muchas, y modelos más todavía, pero la mayoría de los monitores que nos encontramos en el mercado montan transductores que fabrican otras empresas, y las marcas sólo hacen el diseño de las cajas y los divisores de frecuencia, deciden si hacerlos auto-amplificados o no, y los comercializan con su nombre.

En su momento, ésto me llevó a pensar que no hay que fijarse en las marcas de los monitores que voy a comprar, sino en los componentes que montan, y tener en cuenta que muchas veces “sacrifican” calidad para poder poner un precio más competitivo, o sacrifican tamaño para hacerlos más atractivos o que nos resulte más cómodo encontrarles su ubicación.

Fábricas de transductores (tweeters, medios, graves) ya no hay tantas, y resulta mucho más cómodo estudiar las características de los componentes que nos gustaría montar en nuestras escuchas.
Una vez elegidos los componentes, buscaremos qué monitores los montan.

No hay que restringir la búsqueda a monitores de estudio, sino que debemos ampliarla a altavoces HI-FI de gama alta, o de “Alta fidelidad de excepción”, ya que muchos de estos altavoces se pueden encontrar en el mercado de segunda mano, y nos darán mucho mejor resultado y más satisfaciones que muchos de los llamados “monitores de estudio”.

Algunos ejemplos podemos encontrarlos dentro de las marcas Tannoy, Dynaudio o, mis preferidas después de muchas escuchas, Kef.
Que no te de miedo comprar unas cajas con 20 ó más años. Si han durado hasta hoy será porque tienen una buena construcción, y si están en buen estado nos pueden durar muchísimos más años.
Podemos encontrar escuchas que en su día costaron una fortuna por menos de la cuarta parte de su valor.

Es importante acompañar estas escuchas, (la mayoría pasivas), con una buena etapa de potencia.

Si no encontramos ninguno, o el precio nos resulta prohibitivo, diseñamos las cajas y encargamos a un carpintero que nos las haga a medida.

Podemos encontrar tweeters que cuestan unos 100 euros, montados en cajas que cuestan 3, 4, 5.000 euros e incluso más. Lo mismo ocurre con el resto de los componentes.

Si te sobra el dinero, seguramente prefieres que alguien te de el trabajo ya hecho. Si no es el caso (como nos ocurre a la mayoría) quizás dedicarle tiempo a diseñarte tus monitores sea una buena opción.

Una buena decisión tomada a tiempo será lo más económico, ya que unos buenos altavoces te pueden durar toda la vida.

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